LOS ORÍGENES DE LUBA Ni una sola lágrima. Nunca. La pequeña Luba no ha llorado jamás. Cuando hay que hacerlo, eso sí, chilla y grita como si la llevasen los demonios. Porque Luba ha nacido con la culpa dentro. Maria, madre de Luba, no tiene más fa
Reseña de la editorial