A mi hermano le encantó el regalo de nuestra tía. 'La llamaré Teresa' dijo al ver la muñeca de trapo. Cuando mi hermano dijo que quería
dormir con Teresa, mi padre dijo: 'No es grave. Ya se le pasará'. Pero eso no sucedió. Incluso quiso un cochecito en la tienda de
juguetes.
Reseña de la editorial