Algunas culturas lejanas, con climas más severos que el nuestro, con filosofías introspectivas, inventaron los mandalas. Nosotros, que somos muy de calle hasta las tantas y que tendemos a reírnos hasta de la madre... inventamos hace siglos al Pintamonas.
Por primera vez, la terapia cromática, la relajación mediante el acto de colorear y la concentración y paz interior propios del propio ejercicio artístico se convierten, con este Manual del Pintamonas, en algo sorprendente y muy, muy, muy divertido.
Reseña de la editorial
